Asegúrate de no esperar a que tu pelo esté totalmente debilitado y fragilizado, no será demasiado tarde pero, definitivamente, siempre es mejor optar por la protección diaria.
1. Protección del calor
¿Sabías que las herramientas de styling como secadores, rizadores y planchas son los mayores culpables del pelo dañado?
Si bien, el mayor daño se ocasiona por no proteger nuestro pelo adecuadamente antes de usarlos.
Por lo tanto, nunca escatimes en productos de protección del calor pues crean una barrera entre la fibra capilar y la herramienta utilizada.
Tu pelo estará más sano y tu styling durará más tiempo
2. Protección solar
¡Sí! Tu pelo, al igual que tu piel, necesita protección solar...
Tanto los rayos UV, el cloro de la piscina, el sudor como la dureza del agua de la ducha, dañan tu pelo en tus vacaciones de verano aún más que el resto del año.
¿Cómo proteger el pelo del sol? Habla con tu peluquero profesional que puede recomendarte los mejores productos para las necesidades de tu pelo. Invierte en productos de protección solar como la gama Solar Sublime mantendrá tu pelo sano en la playa, después de la piscina y protegido del calor.
3. Mima tu pelo
Parece algo obvio, pero no prestamos realmente atención al trato que le dispensamos a nuestro pelo.
Desenredar el pelo con un peine para romper los nudos.
Optamos con frecuencia por la coloración en casa en lugar de acudir al salón.
Utilizamos champús y acondicionadores pesados que dejan residuos en el cuero cabelludo, causando picores, sequedad e irritación.
Estos son sólo algunos ejemplos de lo que hacemos diariamente sin ser conscientes del daño que le ocasionamos al pelo.
Afortunadamente, sólo se necesita un poco de buena voluntad, la ayuda profesional correcta y un par de minutos diarios para solucionar estos daños.